En boboli tenemos una misión muy clara: contribuir en el futuro de los más pequeños. Campaña tras campaña, hemos querido enseñar valores de respeto, tolerancia e igualdad entre personas, sin condición de género, color, religión o capacidades.
Por eso, hoy, creemos que es un día perfecto para recordar nuestra campaña ‘El banco donde cabemos todxs’, inspirada en una historia real que nos conmovió a todos y nos recordó la importancia de la inclusión social.
En Boboli creemos en un futuro mejor para nuestros niñxs. Un lugar hecho a base de tolerancia, optimismo y humanidad como el que representa nuestro banco. En él, caben todas las risas, todos los colores y todas las diferencias. Porque en el mundo en el que queremos vivir no puede quedar nadie fuera.
En colaboración con Santa&Cole y Urbidermis, creamos un banco rojo de seis metros de longitud en el que cabemos todxs. Un espacio que representa nuestro compromiso con la diversidad, la inclusión y el respeto a las diferencias.
El banco de la amistad
Acacia Woodley es una niña estadounidense que nació con malformaciones físicas. En 2014, con tan sólo 9 años y tras sufrir bullying por parte de sus compañeros y sentirse desplazada, pidió a la directora de su colegio hablar en público delante de todos para hacerles entender que es otra niña más con ganas de pasarlo bien.
Con el fin de poder ayudar a otros niños a no sentirse solos, en el patio de su colegio instalaron lo que ella bautizó como banco de la amistad. Un lugar en el que buscar diversión y compañía, pintado con colores vistosos y mensajes como “valor”, “respeto”, “sonrisa”, en cada uno de los listones.
¡Feliz Día Internacional de las Personas con Discapacidad!