El plogging es una modalidad deportiva con pocos años de existencia que atrae cada vez a más gente. Esta iniciativa sostenible nació en Estocolmo, pronto conquistó todo Suecia y después los países nórdicos. Ahora ya se practica en toda Europa y también en Estados Unidos. En nuestro país ya se han creado grupos de plogging que quieren fomentar la práctica de este deporte.
Lo practican a diario más de 20.000 personas, en más de 100 países distintos. Su dinámica consiste en practicar deporte y al mismo tiempo recoger la basura del entorno. Nos encanta porque es una actividad que asocia dos mundos muy ligados entre sí: el respeto por el medioambiente y la práctica deportiva en espacios naturales. ¿Te animas a practicarlo?
Es practicar deporte, pero con conciencia social. La palabra plogging es la conjunción de dos términos en distintos idiomas: “plocka upp”, que significa recoger en sueco; y “running”, correr en inglés.
La web oficial de esta iniciativa es Plogga y en ella ofrecen algunos consejos para iniciarse en esta práctica deportiva y social.
Hacer plogging en grupo
Aunque puede practicarse de manera individual, el deporte siempre es más agradable cuando se practica en grupo. Con el plogging ocurre algo similar. Sus efectos positivos se ven multiplicados, porque las personas que lo llevan a cabo se pueden retar a sí mismas para recoger más basura al tiempo que prolongan sus sesiones de entrenamiento.
Además ha tenido tanto éxito que ha traspasado las barreras del running y también lo practican los que salen en bicicleta o los que practican deportes de agua.
Y tú, ¿cómo practicas el plogging?
El plogging no tiene normas, se puede practicar donde y como quieras. Los lugares más recomendables son el campo o los bosques y las playas. Por desgracia, tanto la montaña como la costa necesitan de nuestra ayuda para preservarlos lo más limpios posible.
Eso sí, para ir depositando los residuos que vamos encontrando, tenemos que ir bien equipados con bolsas. Así, después podemos llevarlos a su correspondiente punto de reciclaje. Tampoco se nos puede olvidar pasarlo bien, ¡siempre podemos imaginar cómo dar una nueva vida a los residuos!
¿Te hemos convencido? Apúntate a practicar el plogging con nosotros. ¡Cuéntanos tu experiencia!
